En 1964, Don Wolfgang Schöngut Lampe, alemán nacido en la ciudad de Lübeck, inició en Chile una trayectoria que perdura hasta hoy en el ámbito de la pintura domiciliaria y automotriz. Su compromiso personal con la calidad lo llevó a formar un equipo de maestros artesanos, dedicados a la realización de trabajos impecables y llenos de detalles.
La reputación de Don Wolfgang, por su meticulosidad y calidad, se extendió rápidamente entre la comunidad alemana y luego, con el paso del tiempo, se consolidó entre la sociedad chilena. Su nombre se convirtió en sinónimo de excelencia en el campo de la pintura y sus diversas aplicaciones artesanales.
Su pasión por los automóviles también fue un motor en su vida. Con más de 58 autos a su haber, Don Wolfgang cultivó un profundo conocimiento de su estética y mecánica. A través de la experiencia acumulada en desabolladuras, pinturas y acabados, logró alcanzar la perfección en la restauración de vehículos.
Hoy, este legado familiar se encuentra en manos de su nieto, Matías Schöngut. Con la misma dedicación y tradición, ofrecemos a nuestros clientes una atención personalizada y un servicio de excelencia, que combina técnicas modernas con la artesanía tradicional. Restauramos sus autos en el día, con la comodidad de su casa u oficina, preservando los detalles y la calidad que han caracterizado nuestro trabajo por generaciones.
Para quienes nos visitan por primera vez, los invitamos a conocer de cerca nuestro trabajo. Conozcan la diferencia que se logra cuando confían sus proyectos de pintura a manos expertas, herederas de una tradición de excelencia.
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